ESTUDIO BÍBLICO/NOVIAZGO

5.3.19

David Merkh y Alexandre Mendes

Este material fue escrito para un grupo de estudio sobre el tema noviazgo, está permitida su reproducción, no se olvide de citar nuestra página del blog Chicas en la Verdad a la hora de compartir el estudio.

Una vez más gracias por apoyar nuestro ministerio. El noviazgo, es una relación entre dos personas de sexo opuesto, que tienen como meta un futuro casamiento. La Biblia no nos habla sobre el noviazgo, pero si nos trae principios que nos ayudan en todas nuestras relaciones.

Cuando un noviazgo no tiene como meta un futuro casamiento el tal es en vano. 

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Ante eso: El famoso “andar nomás” o también llamado flirteo, no es correcto, a los ojos de Dios toda relación, ya sea entre amigos u otras personas, si no tiene compromiso no vale la pena...

Y una relación sin compromiso para un futuro casamiento con una persona de sexo opuesto puede llevarnos a:
  • Pérdida de tiempo: porque pasaremos todo el día con esa persona, talvez juntos o en las redes sociales; sabemos que para las relaciones necesitamos invertir en la vida de los otros, y eso lleva tiempo, ¿Por qué ir a buscar algo en el momento que no se nos llama para aquello? Piénsalo bien, dos personas que tal vez hoy están en la escuela, al tener una relación para la cual no están preparadas, no demuestran madurez, no sabrán lidiar con su tiempo y la biblia le llama a ese tipo de personas de necias (Efesios 5.15-16).
  • Pecados de índole sexual: claro que sí, porque yo me imagino que cuando besas a aquella persona, no piensas en una heladera, despertamos muchas veces en nosotros y en la otra persona, deseos que no serán satisfechos, pues lo correcto es que ellos sean satisfechos sólo en el matrimonio, lastimosamente hoy en día ya no se coloca límites en las relaciones y caemos en pecado sexual, es el deseo de Dios que nos apartemos de eso, ¿Por qué ir a buscar algo en el momento que no se nos llama para aquello?, nuestro Creador separó el sexo para el matrimonio, porque él sabe que si lo “probamos” en el momento errado nuestros corazones serán lastimados, tarde o temprano, y ¿tú piensas que Dios se agrada con que sus hijas e hijos sufran? (1 Tesalonicenses 4.3).
  • Idolatría: sí, lastimosamente, cuando estamos con una persona solo por “estar", ¿que estamos buscando?, es claro que nuestra satisfacción, usamos a la persona para que nos diga lo linda que somos, o para que nos dé “aquel amor” que estamos buscando, prácticamente nuestra vida gira en torno a esa persona, sin ella “nuestra vida no tiene sentido”, ella ocupa un lugar muy importante en nuestro corazón, un lugar que solo le pertenece a Dios (Éxodo 20.3-5).

En otras palabras, toda relación que no tiene compromiso o un objetivo agradable a los ojos de Dios, es pecado.


Piensa bien:
  • ¿Para qué son tus relaciones?
  • ¿Para un futuro casamiento o para jugar al marido y mujer?
  • ¿Para una amistad que busca crecer en Cristo o “para un amigos con derechos”?
  • ¿Para bendecir a las personas con la Palabra de Dios o para que las personas te “den las cosas a tí”?

¿Cuando considerar comenzar un noviazgo?

Es claro que si queremos hacer las cosas bien, consideraremos comenzar un noviazgo cuando estemos preparadas para el casamiento, y eso no tiene que ver solo con tener una casa, habilidades domésticas o dinero para ello, también depende de la madurez de una persona, refiriéndonos a que ella, lidiará con problemas, con la otra persona, y también tenemos que recordar que es una relación entre dos personas, la otra persona también tiene que estar preparada para conformar una familia, cualquiera puede tener un hijo, pero son pocos los que pueden educar esos hijos en la verdad, cualquiera puede tener una pareja, pero son pocos lo que continuarán hasta el fin. El que mejor sabe si estamos verdaderamente preparados para el casamiento es Dios mismo.

La biblia dice que: “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora” (Eclesiastés 3.11).

Tengo amigas que a sus 18 años ya estaban en un casamiento, otras de 28 que aún no se casan y otras que igual teniendo 40 años se casaron, porque cada historia es diferente, pero lo correcto es saber que el dueño de esa historia es Dios, entonces debemos confiar en él.

Dios sabe y conoce lo que es mejor para tí. Lo mejor de Dios para nosotros es Dios mismo.


Acompañame a Génesis 22: Para adentrarte en la historia, Abraham no podía tener hijos, pero Dios hizo un gran milagro en su vida, después de algunos años, Dios le dió un hijo a Abraham y a su esposa Sara, sinceramente fue un milagro, pues ellos tuvieron ese hijo en su vejez, pero un día, sin explicaciones, ni nada, Dios le dijo a Abraham que entregará a Isaac como sacrificio.

¿Qué crees que Abraham hizo?. ¿Dudo? No, Abraham se lo entregó a Dios, y justo antes de sacrificarlo, un ángel detuvo a Abraham y él no mató a su hijo. Sabes por que Abraham no dudo en entregar a su hijo a Dios, porque él confiaba en que siempre Dios tenía lo mejor para él, y lo mejor de Dios para Abraham no era un hijo, sino Dios mismo, una relación con Dios.

Abraham fue conocido como el padre de la fé, aquel que confiaba plenamente en Dios, y sabía que él tenía lo mejor de lo mejor para él todo el tiempo, Abraham fue conocido también como el amigo de Dios, aquel que se relacionaba con el Señor constantemente. 

¿Como saber lo que Dios quiere de mí?

Dios quiere que confiemos, Dios quiere que nos entreguemos a él por completo, y aprendamos a buscar nuestra satisfacción en él y no en una persona o en cosas, si no entendemos eso hoy dejame decirte que no estarás preparado para un casamiento, porque buscarás satisfacción en una persona, y sabes muy bien que eso no es posible, nada ni nadie sino solo Dios puede hacerte feliz. (Proverbios 3.5-6, Proverbios 4.23).

No entregues aquello más preciado que tienes, no, no entregues tu corazón, sólo existe un lugar en el que tu corazón estará bien cuidado, y no es en un lugar frío y oscuro, como una caja, no, es en las manos de Dios.

Cuidado con los sentimientos, cuando nos dejamos llevar por ellos, seguimos nuestra voluntad y no la voluntad de Dios. Alimenta tu vida con cosas saludables, que tus relaciones sean con verdadero significado, si todavia no leíste nuestro post sobre relaciones que de verdad valen la pena, léelo aquí.

Y por último, para que tu relación en el futuro, de verdad valga la pena, y sea una relación con compromiso sincero, un noviazgo que lleva a casamiento, debes tomar la decisión correcta hoy: La decisión de confiar y esperar en Dios.

Necesitamos aprender a esperar, y en ese proceso, conocer a aquel que ama nuestra vida:

Conocer a Dios (1 Juan 4.19), si hoy no conoces al verdadero amor de tu vida, en el futuro cuando venga alguien y quiera “hacer parte de tu vida” le entregaras por completo tu corazón, y probablemente ya que es un ser humano, él no sabrá como cuidarlo, probablemente, tú tampoco sabrás como cuidar el de él, porque el único que sabe de verdad cuidar nuestros corazones es Dios, necesitamos de él para aprender a amar de verdad y así estar preparados para impartir ese amor verdadero y no egoísta. También cuando encuentras satisfacción verdadera en el amor de Dios, si por si acaso tu principe no llega, o por si acaso si algun dia él llega, se casan pero en determinado tiempo, la ley de la vida viene y él muere, tu estarás preparada para enfrentar esas situaciones con valentía, porque sabrás que no estás sola, mas para que eso sea una realidad en tu vida, necesitas crecer en la realidad del amor verdadero de Dios.

Necesitamos también orar, constantemente entregarnos a Dios en oración (Filipenses 4.6, 1 Tesalonicenses 5.17), ir a él todo el tiempo y orar por aquellas cosas que nos preocupan, por aquellas cosas que nos dejan con duda, y también podemos orar por esa futura persona con la que compartiremos el resto de nuestras vidas, si es que Dios así lo quiere, (Proverbios 31.11-12) ese proverbio dice que esa mujer le hace bien y no el mal a su marido “todos los días de su vida”, incluso “antes de conocerlo”, ¿y como puede hacerlo?, ella separa tiempo para orar por esa persona, por su pureza, por su corazón, y para que Dios lo siga guardando.

Necesitamos también alimentar nuestras mentes con aquello que es correcto, cuidado con las músicas que escuchas, con los filmes románticos, con las amistades, cuidado con lo que piensas, ves, escuchas y dices, aliméntate con lo correcto, no despiertes el amor (Cantares 2.7, Filipenses 4.8).

Y por último pero no menos importante, necesitamos invertir en amistades sinceras y saludables, mucho cuidado con la exclusividad con los muchachos (pasar horas mandándose mensajes solos,andar solos, cuando no son nada más que amigos), puedes ilusionar a una persona, o tú puedes ser ilusionada, y tarde o temprano uno de los dos saldrá lastimado, muchos divorcios comienzan hoy cuando somos infieles a esa futura persona, cuando tenemos “varios potenciales pretendientes” a los que les “dejamos con las ganas” dividiendo nuestros sentimientos con varias personas a la vez, jugando con los otros.

Guarda tu corazón, sé fiel a una única persona, y sé que no lo conoces, pero necesitas entender que un día si Dios quiere llegará y si no comienzas a buscar la fidelidad hoy, déjame decirte que en el futuro eso no cambiará. Jesús dijo que la infidelidad comienza en el corazón (Éxodo 20.14, Mateo 5.28), puedes tener amigos, pero coloca límites, pide ayuda de una persona más sabia si no sabes como, reúnete en grupos con esos amigos y conocelos mejor cuando estás en esos grupos, es ahí donde se revelan de verdad los corazones, y en el momento indicado y cuando Dios vea que es el tiempo correcto, si le dejas la decisión a él, él te traerá a la persona correcta.

  • La pregunta que te hago hoy es ¿Cómo está tu corazón?
  • ¿Está dispuesto a esperar en Dios y confiar en su tiempo? o ¿harás lo que mejor te parezca?
Dios reserva los mayores placeres románticos para aquellos que saben esperar en su tiempo.

Para descargar la presentación, aquí.

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